I started playing sports when I was 4 years old. Athletics were always a part of my life. I even played professional soccer as a young man. But after my pro soccer career was over, I slowed down a little. I stopped exercising for a few days, and those days became weeks, and those weeks into months.
What didn’t change was my eating; I was eating as if I was still exercising. Suddenly, when I looked into the mirror one day and stood on the scale, I realized I weighed 220 pounds. My clothes didn’t fit me, I felt tired all the time … not to mention there was a history of diabetes in my family.
10 years ago, I was living a nightmare, and I felt like I couldn’t wake up. So one day, I stood up and told myself, “Enough of this!” The next day, I was up at 6 a.m. with a group of runners.
Those first running sessions were deathful; I thought I was going to faint. But soon I completed a 5k, and then a 10k, and then a half marathon within six months of starting running. I went on to run a marathon, and that was painful. I suffered a lot. But the adrenaline rush I got when I crossed the finish line was worth it all. I suddenly forgot all the fatigue and said to myself, “Well, where can I sign up again?”
Four marathons later, a friend invited me (or dared me) to do a sprint triathlon. That’s when my life changed.
At that point, I had finished four marathons, so I thought to myself, “How hard can this be?” Now I can laugh about it, but then, it was complete hell! When the race started, I completely froze, amazed to see so many swimmers in the open water, hitting, kicking, etc. I finally pushed myself through the swim and got on my bike, and my legs felt like I was climbing a 10 percent grade mountain! And when I got off the bike to run the 5k? It was harder than ever to make my legs move. But in the end, it was the best feeling of my life.
When I finished that triathlon, I knew in my heart that this wasn’t temporary. Triathlons were my new passion. I’ve always told myself, “if you’re afraid of something, do it.” This is especially true for triathlons—a sport in which every distance has such a different challenge, from the high adrenaline in a sprint, to having patience in the tough parts, understanding your cadence and practicing wise nutrition. In the many triathlons I’ve done, I’ve seen everyone from children to seniors, including a nun over 80 years of age. The experiences that I’ve had are indescribable.
A few years later, several sprints, Olympics, and Half Ironmans later, I can tell you that I am in love with this sport. I truly believe there are no limits—only those that you put in your head. You learn to fight against yourself, and that if you put your mind to it, anything is possible.
Fede Lopez’s story in Spanish
Puedes imaginarte, hacer deporte toda la vida, haber empezado en el deporte a los 4 años, y sobre todo haber jugado futbol profesional, y de repente un día dejas de hacerlo unos días, esos días se convierten en semanas, y esas semanas en meses.
Empiezas a comer y comer como si siguieras haciendo ejercicio y de repente cuando abres un día los ojos y te paras en la bascula te das cuenta que pesas 100 kg!!!!!!!. Que tu ropa no te queda, que hasta te molesta. Que te cansas mas de lo normal y que de repente te sientes cansado todo el día, y súmale que en la familia hay historial de Diabetes!!!!!
Es como estar en medio de una pesadilla, de las que no te puedes despertar; me paso hace 10 años aproximadamente, y fue entonces que dije ya no mas, basta de esto!!!!!!
Tome mis tenis y al día siguientes estaba yo levantado a las 6 am con un grupo de corredores.
Las primeras sesiones fueron de muerte, creía que me moría, pero poco a poco vinieron carreras de 5km, después una de 10 km, y yo pensaba, un medio maratón, nunca!!!!! Eso es de locos, pues a los 6 meses ya estaba haciendo yo mi primer medio maratón, y de repente llega el Maratón!!!!!, si es verdad lo sufrí y mucho, pero esa adrenalina al cruzar la meta donde se te olvida todo el cansancio y dices, bueno cuando es el siguiente??? .
4 Maratones después la invitación para un Triatlón Sprint!!!, quien iba a decir que esa invitación, casi reto , me cambiaria la vida. Conseguir bici, “nadar”, correr, caso, guantes, googles, etc.
Un triatlón sprint vs un maratón, después de 4 maratones que me iba a hacer un Sprint!!!! Jajajaja ahora me rio, pero fue un infierno!!!!!!!! Primero, congelado al momento del arranque al ver tantos nadadores en mara abierto junto a mi pegándose, pateándose, etc. Ok sobreviví, me subo a la bici y siento las piernas como si estuviera subiendo un montaña grado 10%! sobreviví, y bájate a “Correr” 5 km jajaja, nunca fue más duro correr que en esa ocasión, pero sabes, fue la mejor sensación de mi vida, me di cuenta que siempre habrá retos en la vida y que nada es imposible!!
Ese día me di cuenta de que el Triatlón era algo que no sería pasajero, normalmente soy de la idea de que “si algo te da miedo enfréntalo “, nunca mejor dicho, un deporte que cada distancia tiene un reto tan diferente, la adrenalina al tope en un sprint, hasta la paciencia, la cadencia y la nutrición inteligente en un medio iron man. Ver a las personas desde niños hasta personas mayores, ver a una “Monja” de más de 80 años disfrutar este deporte, son cosas que no puedes describir hasta que lo vives.
Unos años después, y por supuesto ya con varios Triatlones sprints, olímpicos y algunos Medios Ironman, puedo decirles que estoy enamorado de este deporte, decirles que no hay límites, mas lo que tu pongas en la cabeza. Todo es posible, aquí aprendes a encontrarte contigo mismo, a luchar contra ti mismo, y sobre todo demostrarte que si se quiere se puede. Y claro el Triatlón me ayudo a encontrar una nueva pasión sobre, La Bicicleta! , Otro mundo totalmente diferente, del cual ya platicaremos en alguna ocasión futura!